CONEXIÓN CON EL PAISAJE
Imágenes: © Edward Ogosta Architecture
Esta vivienda unifamiliar situada en el valle de Coachella en California, debe su nombre (‘cuatro ojos’ en español) a las cuatro torres que la conforman. Estas torres –llamadas “sleeping towers” pues en su interior se hallan las habitaciones–, se posicionan de manera que cada una ofrezca un espectáculo visual distinto. Desde aquella que da hacia el este es posible ver el amanecer; la cordillera desde la que da al sur; las luces de la ciudad hacia el oeste; y el cielo estrellado en la última, cuyo techo es un vidrio especial para esto. Debido a que cada una ofrece una experiencia única, las habitaciones son idénticas en tamaño y decoración, para que los habitantes de la casa puedan rotar, de acuerdo a qué desean experimentar esa noche. Uniendo las torres, en el primer nivel, está el resto de la casa, desplegada horizontalmente sobre el paisaje. Grandes ventanales la conectan con el entorno desertico de Coachella, traspasando luz natural y manteniendo la experiencia de conexión con el ambiente que se vive durante la noche. Una gran piscina exterior completa la casa.
En suma, su arquitectura está en directa relación con el valle en que se sitúa, tratando de entregar a sus habitantes una experiencia de conexión con la tierra. El dormir en esta casa permite, según el arquitecto: “quizás hasta percibir el movimiento de la Tierra mientras gira bajo las estrellas.”
www.edwardogosta.com

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