LA NATURALEZA COMO ARQUITECTO
Fotografía © Joe Fletcher
El singular paisaje de San José del Cabo, en México, ha sido el lugar escogido como escenario para el Hotel Mar Adentro, cuya propuesta a cargo del arquitecto mexicano Miguel Ángel Aragonés, se configura a través de una serie de plataformas que parecen flotar sobre el agua que creando un archipiélago artificial. “La primera vez que visité el terreno y percibí el desierto con el agua de fondo en una línea horizontal, diáfana y clara, sentí que se trataba de un lugar que lo contenía todo, por lo que mi intervención debía ser una caja que tuviera su propio mar y casi su propio aire” explica el arquitecto, quien definió el agua como un elemento más de su propuesta haciendo que recorra y bordee todos los volúmenes. El hotel cuenta con 145 habitaciones además de una zona residencial que incluye villas y departamentos, los recintos fueron creados a partir de módulos prefabricados y elaborados en Italia por Poliform, cada habitación permite a sus huéspedes personalizar los espacios de acuerdo a diferentes niveles y tonos de iluminación y temperatura.
Para el proyecto es fundamental la iluminación, sus superficies albas cambian de tono de acuerdo a la luz del sol y por las noches se iluminan con los colores de la luz artificial y son reflejas y duplicadas por el efecto del agua.