Ecos de Kahn

Fotografía: Bre Furlong

En el corazón de Filadelfia, entre los muros históricos de Furness Hall, emerge Frankie’s Summer Club: un bar pop-up efímero que transforma un pasaje olvidado en un espacio vibrante, cargado de referencias arquitectónicas. Concebido por Scout e ISA, el proyecto reinterpreta —con desenfado y precisión— un diseño no construido de Louis Kahn, activando el lugar con una instalación que es a la vez homenaje, intervención urbana y experiencia sensorial.

Un arco púrpura señala la entrada, conectando —material y simbólicamente— con las alas de ladrillo originales. Más allá, un sendero conduce a la estructura amarilla del bar, coronada por una chimenea de malla de vinilo que se eleva como un guiño directo a las formas monumentales que Kahn imaginó en 1964 para este mismo campus. Este gesto vertical no solo organiza el espacio, sino que introduce escala, luz y teatralidad al entorno íntimo del patio.

Con una estética alegre y modular —asientos serpenteantes, colores vibrantes, mobiliario plástico clásico— Frankie’s celebra lo cotidiano sin perder profundidad conceptual. Al articular historia, arquitectura y gastronomía local, el proyecto activa una memoria latente del lugar y demuestra cómo lo no construido también puede dejar una huella, aunque sea temporal.