Atmósfera ficticia
Fotografía: Alicia Macias
En el espacio ocupado anteriormente por el cine Duque de Alba, en Madrid, y que permaneció durante años abandonado, la oficina española Plantea Estudio diseñó un nuevo concepto de cine que suma a su función tradicional otras actividades como música en vivo, presentaciones, conferencias y exposiciones. El proyecto dio vida a cuatro ambientes diferentes en el lugar que antes estada la sala para 300 personas; bajo la pantalla original se situó una barra y una pequeña cocina, frente a ellas, el público se sienta en gradas de tablero contrachapado, sillas de playa o columpios, como si se tratara de una plaza. El antiguo anfiteatro en tanto, es ahora una sala de cine para 64 personas y ha sido revestido en terciopelo; junto a él, se instaló un pequeño bar de cócteles con una atmósfera más tenue. La vegetación de los espacios fue definida en colaboración con Rent a Garden, lo que potencia la idea de estar en el exterior.