Inmersión sensorial
Fotografía: Jonas Bjerre-Poulsen
En medio de las aguas serenas del Hardangerfjord, Noruega, se encuentra una experiencia sensorial y culinaria como pocas: el restaurante Iris. Más que un destino gastronómico, este lugar galardonado con una estrella Michelin es una oda a la sostenibilidad y al entorno natural, envuelto en la innovación arquitectónica flotante de Salmon Eye. Diseñado por Kvorning Design, el edificio elipsoide brilla como el salmón plateado al que homenajea, y desde el primer momento, captura la atención con su forma única, como un ojo que todo lo ve en el vasto paisaje. En cuanto a su diseño, el interior del restaurante Iris destaca por su fusión de curvas suaves y texturas orgánicas que contrastan con la brutalidad del exterior de acero. La madera de nogal, los muebles a medida y los detalles de iluminación crean un ambiente íntimo que complementa el entorno natural del fiordo. Las divisiones estratégicas dentro del espacio generan áreas más pequeñas y acogedoras, diseñadas para invitar al descubrimiento gradual. La conexión entre la naturaleza, el diseño y la sostenibilidad es evidente tanto en la atmósfera del restaurante como en su arquitectura exterior.