Rock en su máxima expresión
Fotos: Ossip van Duivenbode
Los espacios dedicados a la música en vivo generalmente son oscuros y de formas simples, así se mantienen como plataformas camaleónicas que se adecúan al estilo de cada concierto. Sin embargo, en Dinamarca existe un espacio lleno de identidad desde lo arquitectónico. Se trata de Ragnarock un edificio de 3.100 m2 que da la bienvenida a sus visitantes mediante una fachada dorada con un voladizo titánico. Ubicado en un barrio donde antes se erigían principalmente fábricas, esta construcción abocada a la música rock en vivo, es parte de un proyecto más grande llamado ROCKmagneten que abarcará más de 11 mil metros cuadrados. Auditorio, oficinas administrativas y un bar son parte de los espacios Ragnarock ofrece a los fanáticos de la música. La construcción fue diseñada para el Danmarks Rockmuseum por los arquitectos de MVRDV en sociedad con COBE quienes escogieron la forma de las tachas clásicas en la vestimenta de los punks para el revestimiento exterior e interior. Un rojo intenso resalta en los muros interiores con una alfombra en el mismo color impacta a quien se pare a observar esta gigantesca estructura en su mayoría de hormigón que contrastada con el aluminio anodizado de las tachas doradas y rojas. Ragnarock además tiene un museo con exposiciones inmersivas que hará sentir a los visitantes como todas unas estrellas de rock.
