Metal vivo
Fotografía: Yongjoon Choi
Pul, la nueva serie de la arquitecta parisina Nara Lee, replantea el mobiliario escultórico desde la fricción entre lo orgánico y lo industrial. Presentada en la exposición The Sun Room en Seúl, la colección reúne sillas, bancos y biombos construidos con láminas de acero inoxidable perforadas y correas de cuero ampliadas hasta la exageración. La unión entre ambos materiales revela un trabajo minucioso, casi quirúrgico, cuya presencia cambia con cada variación de luz.
Las piezas mantienen líneas sobrias y geometrías contenidas, pero su sensibilidad proviene del entorno natural que rodea las montañas de Seúl. Los respaldos metálicos, curvados y con una leve flexibilidad al contacto, remiten a la resistencia silenciosa de los organismos vivos. El cuero, cosido a mano en ojales de gran tamaño, introduce una calidez táctil que desarma la frialdad del metal y sitúa la colección en ese territorio híbrido entre lo natural y lo urbano que inspiró el proyecto.
Aunque su apariencia podría insinuar rigidez, Lee subraya que cada pieza es sorprendentemente cómoda y plenamente utilitaria, una prueba de que la tensión entre fuerza y delicadeza puede resolverse en objetos destinados a acompañar la vida cotidiana.









