Espacios continuos
Fotografía: Fernando Alda
Creada a partir de la fusión de varios elementos estructurales por el arquitecto chileno Felipe Assadi, Casa Cipolla se ubica en la localidad de Pichidangui, y al igual que otras obras de su autor, “privilegia el habitar una estructura antes que estructurar el habitar, es un sistema de equilibrio”, según él mismo declara”. La vivienda se presenta a partir de una lógica organizacional propia en la que su materialidad es trabajada con un solo espesor para solucionar muros, losas, vigas, rampas y escaleras. Su programa doméstico está compuesto por tres dormitorios, dos baños, un espacio común de living, comedor y cocina integrados, además de una pequeña bodega exterior, los que se desarrollan por completo en una losa de hormigón de 20 cm de espesor, la que además arma el acceso y la escalera de ingreso a la casa, así como el puente hacia la azotea, su pasamanos y la azotea misma, que es a la vez el alero de una zona que antecede a la entrada; así, todo se transforma en una seguidilla de espacios colaborativos e inseparables.