Laberinto interior
Fotografía: Julie Masson
Situada en la localidad de montaña de Haute-Nendaz, en Suiza, esta pequeña casa de madera y su taller se encuentran en una zona boscosa, frente a la vivienda principal. El diseño es obra del estudio Lionel Ballmer, quienes segmentaron el programa en dos, creando al medio un jardín íntimo. Los volúmenes resultantes se presentan como monolitos simples con todas sus caras cubiertas por un revestimiento de toscas tablas de alerce, lo que les permite mimetizarse con el entorno vegetal. Dentro de la casa, una escalera central actúa como columna vertebral del proyecto y organiza los diferentes niveles; los espacios sociales ocupan los pisos inferiores, mientras que las áreas más privadas están en la parte alta. Se creó un “laberinto interior” que genera una sensación de amplitud y permite que los espacios interactúen entre sí, pese a estar claramente divididos.