Lenguaje propio
Fotografía: Luis Gallardo
Para este proyecto, el estudio norteamericano Belzberg Architects se enfocó en investigar el potencial de diseño de una propiedad a mitad de cuadra en Ciudad de México. En general, los edificios de bloques intermedios solo consideran la fachada que da a la calle, dejando los laterales en blanco; como respuesta a esto, los arquitectos crearon una fachada dinámica que aumenta la visibilidad del volumen desde una variedad de perspectivas, al tiempo que ofrece una experiencia memorable para los ocupantes y transeúntes. La estructura de este espacio de oficinas comerciales alcanza 2.230 m² distribuidos en seis pisos, superficie que la distancia de sus vecinos y hace visible el costado del edificio. Para mejorar la conexión entre las fachadas expuestas, las envolvieron en acero al carbono perforado; las aberturas en la piel están optimizadas para la ventilación y la luz, pero permiten mantener la privacidad y visibilidad para los ocupantes.
