Curvas fluidas
Fotografía: Erik Jørgensen
Inspirado por la tradicional pasta fresca al huevo, el diseñador británico Damian Williamson ha creado una de las más recientes piezas de la firma danesa Erik Jørgensen. En esta butaca, la tapicería del respaldo y el apoyabrazos está plegada de la misma manera que la pasta. Ovo es una pieza sofisticada de curvas llamativas que descansa sobre un armazón rígido de acero, material que también es utilizado para conectar el respaldo y la parte delantera del asiento a través de una delgada línea; como resultado se logra una lúdica interacción entre el cuero y el metal, ocultando al mismo tiempo la costura. “El diseño de Ovo es ante todo generosidad, pero también comodidad”, explica Williamson, quien ha concebido esta butaca como una pieza versátil capaz de integrarse a la privacidad de un ambiente residencial o de ofrecer confort en la suite de un hotel o un vestíbulo.
