Tributo material
Fotografía: Simone Bossi
La primera pregunta que se planteó Studio Wok al recibir este encargo fue: ¿Cuál es la esencia de la Costa Esmeralda? Al pensar en esta zona de Cerdeña, en Italia, surge la imagen de rocas de granito moldeadas por el viento, materialidad que dialoga con los verdes del Mar Mediterráneo. De esta manera, el interior del restaurante se definió con características propias de una cueva, con formas sinuosas y colores tierra que crean una atmósfera hogareña y evocan una idea arcaica del entorno. El restaurante está amueblado en su mayoría con objetos diseñados especialmente para el proyecto, como un mostrador revestido por azulejos en distintos tonos de verde para hacer eco de uno de los tonos predominantes en el entorno. Este volumen contrasta con las luminarias de color burdeos diseñadas por Michael Anastassiades que se utilizaron en todo el restaurante. El patio de la parte trasera actúa como una extensión del salón principal, allí se creó una cubierta textil permeable que deja entrever el cielo.
