Mueble habitable
Fotografía: Heren 5
Todo el programa de esta residencia se ordena para lograr que las rutinas cotidianas estén conectadas visualmente con lo que pasa en el exterior. El diseño apuesta por lo esencial y por un uso inteligente de las dimensiones.
Arquitectura y diseño se unieron para dar forma a este loft ubicado en el barrio de Buiksloterham, en Ámsterdam, en un desarrollo residencial que se enfrenta en primera línea al canal Johan van Hasselt y que por tanto, confiere a cada unidad vistas privilegiadas hacia esta zona de la ciudad. La propuesta, que nace de una colaboración entre el estudio Heren 5 y el diseñador de mobiliario Paul Timmer, basa su esencia en identificar las dos funciones vitales más importantes de una residencia, dormir y comer, para transformarlas en el núcleo de todo el espacio. El recinto posee 3,5 m. de alto, lo que permitió introducir una estructura interna que fragmentó la planta, dejando la habitación en altura para maximizar el área y generar una sensación de mayor amplitud. Así, la cocina y el comedor ocupan el primer nivel y se relacionan directamente con el paisaje urbano, en tanto que la sala de estar, el baño y el dormitorio se ubican en altura, resguardando su privacidad y estableciendo conexiones jerárquicas. Este nuevo orden y apilamiento de los espacios, crea un loft compacto pero con una sensación generosa.
Publicado en Revista Ambientes Nº 131