Procesos locales
Fotografía: Federico Cairoli
En una montaña de difícil acceso se implanta esta casa buscando resaltar las irregularidades de un terreno inclinado y, de esta forma, delimitar dos jardines muy distintos. La vivienda fue diseñada por el arquitecto colombiano Santiago Pradilla en colaboración con el colectivo Zuloark como un prototipo construido mediante procesos locales. La vivienda está ubicada en el Departamento de Cudinamarca y fue concebida para los dueños de una plantación de café; posee una estructura de madera, una fachada tejida y el techo está cubierto de tejas. El programa está dividido en dos pisos, con una sala de estar de doble altura, comedor, cocina y un dormitorio en el nivel inferior, además de dos dormitorios en el segundo nivel. El gran volumen interior está dividido por pantallas de fibra natural Yaré que crean también balaustradas para el piso superior; persianas similares cubren toda la elevación sur de la estructura, lo que permite que este lado se abra completamente hacia el exterior, a la sombra del voladizo del techo.