FUNDIRSE EN EL PAISAJE
Fotografía © Rory Gardiner
Esta vivienda es el más reciente proyecto de la arquitecta mexicana Tatiana Bilbao y corresponde en realidad, a un trío de volúmenes entre los que se distribuyen los diferentes recintos, enfatizando además cada uno, alguno de los tres materiales principales que componen la paleta de la propuesta. La casa está ubidada en una ladera boscosa, hacia el norte de la ciudad de Monterrey, y se organiza entorno a una piscina de líneas curvas y a los límites que impone el paisaje; la más grande de la estructuras posee una planta regular y un techo asimétrico de cúspide, sus fachadas están revestidas en cristales espejados, logrando fundirse con el entorno natura y disminuir así su presencia en el paisaje. Este edificio alberga a la cocina, el comedor y una sala de estar de líneas minimalistas, espacios que están protegidos por una celosía con un patrón en forma de chevrón. En los volúmenes aledaños se instalaron los dormitorios, en los que destaca una geografía escalonada, así como paredes de tierra apisonada y ladrillos de barro cocido.