Pasado industrial
Fotografía: Simon Menges
El Cantonal Museum of Fine Arts diseñado por el estudio Barozzi Veiga forma parte de un plan maestro que dotó a la ciudad de Lausana de tres nuevos recintos que comparten el mismo terreno. Este en particular, se emplaza en el extremo sur y se presenta como un volumen monolítico longitudinal que expresa la memoria del sitio, una antigua estación de trenes, haciendo eco de este entorno industrial mediante formas pragmáticas, geometría rigurosa y líneas duras. El edificio es relativamente hermético para proteger las colecciones del museo y tiene por tanto, una fachada cerrada hacia los rieles y más abierta, animada y permeable en el otro extremo. La planta baja se desarrolló como una extensión de la plaza pública y alberga las principales áreas sociales, para dar paso a un programa simple y sintético estructurado a partir de cinco núcleos en cada nivel. Las fachadas de ladrillo evocan la historia industrial del sitio y ofrecen una textura y un patrón vibrante para el monolito.